Vitamina C para superar el resfriado
Se habla mucho de la capacidad de la vitamina C para superar el resfriado. Sin embargo, pocos sabemos por qué. Algunos animales tienen la capacidad de generar en sus propios organismos esta vitamina, pero nosotros no. Lo que pasa entonces es que los humanos debemos buscarla en el exterior.
La Vitamina C es antioxidante y se encuentra en frutas, verduras y hortalizas
Tanto cocinar estos alimentos, como almacenarlos durante mucho tiempo, puede hacer que se reduzcan las cantidades de vitamina C.
La vitamina C, conocida también como ácido ascórbico, cumple varias funciones en nuestro cuerpo: una de ellas es ayudar a que nuestro cuerpo produzca colágeno, elemento fundamental para la creación de tejidos, cartílagos y tendones. También tiene un gran poder antioxidante que combate el envejecimiento y nos protege de los rayos del sol, del estrés, de la contaminación, etc.
Son más de 200 los virus que pueden causar los síntomas del resfriado y cada persona puede padecer unos síntomas u otros. La vitamina C cumple un papel importante en el alivio y prevención de los síntomas del resfriado aunque si bien es cierto, por sí sola no se ha comprobado que pueda evitar que cojamos un resfriado de vez en cuando.
En cambio, ha sido comprobado que, en ciertos organismos que tienen un buen nivel de vitamina C, se presentan menos probabilidades de tener resfriados, además de ayudar a acortar y disminuir los síntomas que acompañan la infección.
El Premio Nobel de Química y de la Paz, Linus Pauling, escribió en los años setenta un libro que hacía referencia a la importancia de la vitamina C para evitar el resfriado. Sin embargo, sólo en algunos casos, como en los deportistas de alto nivel que deben estar sometidos a ejercicios físicos intensos durante períodos breves, se ha demostrado que el consumo de un zumo de naranja (concentrado de vitamina C) reduce el riesgo de constipados hasta un 50%.
Vitamina C, gran aliada para la salud
La vitamina C es también una aliada de la salud del hombre pues ayuda a reducir el riesgo de cáncer y enfermedades del corazón. En 2007, oncólogos, de la Universidad de Hopkins, demostraron que el consumo de este nutriente (vitamina C) puede demorar el crecimiento y la diseminación de algunos tipos de cáncer. 
Además, es un regulador excelente de la presión sanguínea y reduce la producción de cortisol, por lo que es buena para combatir el estrés.
Al mantener un buen estado de salud, es mucho menos probable que nuestro organismo no pueda sobrellevar un resfriado. La vitamina C debe ser consumida no solo en naranjas y limones sino también en otros alimentos como el brócoli o las fresas.
