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La importancia de la vacuna para la gripe

Para protegernos de algunas infecciones como la gripe, no es suficiente con lavarse las manos, no acercarse a personas contagiadas o evitar aglomeraciones. Debemos seguir otras recomendaciones. La vacuna contra la gripe es una forma efectiva para prevenir considerablemente la enfermedad y sus complicaciones asociadas.

¿Qué causa la gripe?

Es una enfermedad causada por el virus de la influenza que ataca las vías respiratorias altas y repercute en todo el organismo debilitándolo. Una persona infectada puede resultar contagiosa desde un día antes de notar los síntomas hasta pasados entre 3 a 7 días de padecer la enfermedad. Los niños resultan contagiosos incluso después de 7 días.

El virus de la gripe o influenza nos parece algo tan cotidiano que nos olvidamos de que ha sido la causa de millones de muertes a lo largo de la historia de la humanidad. Es una infección a menudo sin gravedad, pero que puede complicarse si nuestra salud está debilitada, por lo que existen ciertos grupos de población a los que se les recomienda encarecidamente la vacuna antigripal.

La importancia de la vacuna

A menudo confundimos la gripe con el resfriado. Podemos estar infectados con el virus si tenemos estos síntomas:

  • Dolores musculares
  • Fiebre alta y escalofríos
  • Dolor de cabeza
  • Tos seca
  • Sensación de debilidad y fatiga
  • Malestar generalizado

¿Quiénes tienen más riesgo de complicaciones asociadas a la gripe?

  • Mujeres embarazadas
  • Bebés
  • Niños menores de 5 años y especialmente de 2 años
  • Personas mayores de 65 años
  • Personas con enfermedades crónicas tales como: diabetes, enfermedades pulmonares o renales, cáncer, etc.
  • Personas obesas
  • Trabajadores públicos

¿Cuándo hay que vacunarse contra la gripe?

La fecha ideal para vacunarse contra la gripe es en otoño. Octubre sería un buen momento para anticiparnos a los meses más conflictivos (diciembre, enero y febrero), cuando mucha gente cae enferma por culpa de esta enfermedad y hay mayor riesgo de contagio.

No obstante, la vacuna antigripal es la mejor prevención.

La vacuna contra la gripe es el método más eficaz para reducir el riesgo de contraer la infección. No puede ser causante de la enfermedad, ya que los virus que contiene están muertos o inactivos.

Nada mejor para prevenir y evitar que una gripe se convierta en una enfermedad respiratoria mucho más grave, que vacunarse anualmente al comienzo de la estación otoñal. La vacuna es un método simple y efectivo que no debemos despreciar.

¿Qué hacer tras ponerse la vacuna antigripal?

Tras vacunarse contra la gripe, es posible que se sienta dolor en el sitio donde fue puesta la inyección, incluso llegar a tener fiebre leve. No obstante, esos problemas no guardan relación con la gripe.

Después de habernos puesto la vacuna contra la gripe debemos seguir siendo precavidos y protegiendo nuestro organismo. Lavarse las manos con jabón frecuentemente y durante unos veinte segundos ayudará a deshacerte de los gérmenes que provocan la enfermedad.

Además, la propia variación del virus hace que, de año en año, la especificidad de las proteínas varíe. La protección de una vacuna sólo es por lo tanto efectiva durante una temporada.