

El resfriado común es provocado por una amplia diversidad de virus y la causa guarda una estrecha relación estacional. La mitad de los casos están producidos por rinovirus, menos de un 10% por ciertos tipos de coronavirus y, ocasionalmente, por otros virus como de la parainfluenza.
Podemos distinguir diferentes tipos según la estacionalidad. Los resfriados de primavera y otoño son producidos principalmente por el rinovirus,. Los catarros en invierno suelen ser producidos por coronavirus. Incluso en un 30-40% de los casos el virus responsable es desconocido.
Aparte de la exposición a los virus causantes, los factores que pueden facilitar la infección son: fatiga excesiva, estrés emocional o fase intermedia del ciclo menstrual.
La vía de transmisión de los virus catarrales es a través del aire, llegando por gotitas expulsadas por los enfermos o por contacto directo con éstos al compartir objetos contaminados como utensilios, toallas o cubiertos. Si te tocas los ojos, la nariz o la boca después de tal exposición es probable que contraigas un resfriado.
El contagio puede darse a las pocas horas de ser infectado (incluso antes de desarrollar síntomas), hasta aproximadamente 2–3 días después de haber comenzado con los signos propios del resfriado.
Por lo general, el grado de afectación dependerá de la edad del individuo y su estado inmunitario.
Conoce más sobre los síntomas del resfriado para ayudarte en su detección y evitar el contagio.