La gripe es una patología causada por un virus. En la mayoría de los casos nuestro sistema inmune tiene la capacidad de luchar contra las infecciones causadas por este microbio y logra eliminarlo en cuestión de días o semanas, pero siempre dependerá del tipo de germen que sea y del estado general de salud de la persona afectada.
Existen 3 tipos de virus de la gripe A, B, C y D. Los dos primeros son los causantes de las epidemias en humanos
¿CUÁNTO DURA LA GRIPE?
Este tipo de infección es autolimitada, y alcanza su máxima concentración en el organismo hospedador a las 48-72 horas de haberse contraído.
Los síntomas aparecen repentinamente, aproximadamente en 24 horas y, transcurridos 2-3 días desde el inicio de la sintomatología, la fiebre empieza a remitir, los síntomas se hacen más leves y, si no surgen complicaciones, el cuadro desaparece en una semana en la mayoría de los casos.
Sin embargo, en ciertos grupos de riesgo como los ancianos, la enfermedad puede manifestarse como dificultad respiratoria, incluso con producción de esputo (y la infección puede conllevar graves complicaciones, como neumonía), mientras que en niños son frecuentes la otitis o las molestias abdominales.
Asimismo, en los niños, por ejemplo, la gripe dura de 7 a 14 días y los síntomas pueden permanecer por hasta 3 semanas.
Hay que aclarar que una persona con influenza es contagiosa a partir de 24-48h a que se presenten los síntomas. Los adultos siguen siendo contagiosos hasta 4-5 días y, en el caso de los niños pueden seguir siéndolo hasta 7 días o más. Es decir, se puede contagiar la gripe a otra persona antes de que uno sea consciente de que está enfermo; así como durante la enfermedad.
Es importante acudir al médico en caso de que las infecciones se prolonguen en el tiempo más allá de las duraciones típicas descritas anteriormente o de si por ejemplo la temperatura corporal supera los 39ºC y persiste durante más de tres días.
